Aquí os dejamos la crónica del seminario en Japón ,una experiencia espectacular el poder enseñar nuestro Krav Magá en uno de los países cuna de las artes marciales más antiguas. Tras un viaje de muchas horas (pero que muchas) llegada a Tokio, agradecer desde aquí a Lucía y a su empresa,Tokyo Nightcrawlers, patrocinadora principal del seminario, el estar pendientes de mi en todo momento, hacer de traductora y convertir mis 5 días en Japón en una experiencia espectacular, si tenéis que desplazaros a Japón y queréis una empresa de confianza que allí os acompañe, traduzca y os enseñe los recovecos del Tokio que no sale en las guías de viaje os la recomiendo.
Al final por motivos familiares no pude estar la semana que tenía pensado y tuvimos que aplazar el de Sendai para otro viaje. Como había gente de distintos niveles en el de Tokio decidimos dividirlo en dos, uno para gente experta en otras artes marciales y deportes de contacto (incluido varios competidores a nivel nacional de K-1) y otro para gente más novatilla en este mundillo.
Para la gente más novata cosas más sencillas como salidas de agarres, golpeo básico, suelo básico… y para la gente más experta ya cosas más agresivas y complicadas, más de 20 personas entre los dos grupos lo que está más que bien allí al ser el Krav Magá relativamente todavía poco conocido. Dando clase allí vas dándote cuenta de las diferenciasculturales, el respeto y silencio era total en durante la clase, pidiendo hasta permiso para preguntar, en España todo es bastante más relajado e informal (cosa que personalmente prefiero), también varias chicas (o más bien la mayoría) prefirieron no salir en las fotos por timidez (cosa que aquí también es raro que pase), mucho nivel entre la gente experta ya que la mayoría practicaban artes marciales casi desde que empezaron a andar. Después del seminario a conocer Tokio que de noche es espectacular.
Los dos días siguientes aprovechar para hacer una visita a templos y sobre todo a algo que era un sueño desde pequeño, visitar la tumba de las 47 Rônin, legendarios samurais, símbolo del honor y fidelidad que caracterizan el Bushido. Lugar mágico para los que nos gustan este tipo de historias, una vez allí todavía es más espectacular, un silencio total, incienso en cada tumba… algo digno de ver. Ya de martes a primera hora (después de dormir la última noche como curiosidad en un hotel capsula , por cierto son una maravilla) otro día casi entero de viaje y llegada a Gijón. Una experiencia alucinante,infinitas gracias a la gente de Japón por el interés en llevarme y en aprender, por su buen trato y por darme todas las facilidades del mundo para cambiar vuelos y demás a última hora. Ya estamos buscando fecha para el siguiente ya que gustó mucho a la gente que asistió, también estamos cerrando fecha para algo bastante importante allí. Tokio, digno de recordar.